Swinger es la palabra con la cual se denomina una forma de actividad sexual en la que las parejas están dispuestas a compartir con otras parejas y/o individuos para incrementar las posibilidades de obtener placer. Proveniente del inglés Swing, que significa columpiarse o balancearse, Swinger se refiere a la posibilidad de alternarse al intercambiar parejas en el ámbito sexual.
Quienes practican el swinging consideran que más que una tendencia es un estilo de vida, para participar esta actividad los individuos deben cumplir con ciertas características necesarias para que la experiencia se disfrute a plenitud, la personalidad, el conocimiento sobre el tema y la forma de pensar de cada uno son elementos clave para quienes disfrutan y participan en encuentros de este tipo.
Así mismo las parejas swinger suelen adaptar aspectos de su vida para poder participar activamente de este movimiento, factores como: su relación con la sociedad, al tener que dedicar tiempo a esta actividad, muchas veces de forma furtiva, además de poder relacionarse amistosamente con las parejas que realizan los intercambios; su poder adquisitivo, ya que estos encuentros implican gastos en membresías, juguetes, accesorios, lencería, etcétera; e incluso su apariencia física al considerar importante verse de forma atractiva y deseable para las potenciales parejas sexuales son factores que necesariamente hay que incluir en el día a día. Es por esto que el movimiento swinger frecuentemente se denomina como the lifestyle o el estilo de vida alternativo.
Las bases del swinger son el consentimiento y la confianza en pareja; ambos deben estar conscientes, de mutuo acuerdo y deben separar la emocionalidad de la sexualidad para lograr disfrutar de los encuentros, un encuentro donde no existen estos componentes de confianza no es considerado un encuentro swinger.
Contenido
Un poco de historia: los comienzos del movimiento swinger
Se desconoce un hecho preciso a partir del cual haya nacido la práctica Swinger; es sabido para muchos las exóticas actividades sexuales que eran comunes en la antigua Grecia o en Roma, por ejemplo; sin embargo los datos que se tienen del inicio de actividades de características similares al swinging en la historia se encuentran durante los años 40, específicamente durante la Segunda Guerra Mundial cuando los hombres dejaban solas a sus esposas y muchos de ellos no lograban regresar; por previo acuerdo los hombres que volvían se hacían cargo de las mujeres, tanto emocional como sexualmente. Esta práctica se fue expandiendo entre familias asociadas a la milicia y poco a poco al resto de la comunidad; dado que en ese momento la cantidad de mujeres era notablemente mayor por cada hombre, esta actividad de compartir parejas se denominaba wife-swap o intercambio de esposas.
En los años 60 y 70, a partir de movimientos como el Free Love y el auge de la liberación sexual, los encuentros swinging se hicieron cada vez más frecuentes y el nombre intercambio de esposas fue dejado atrás implementándose el uso de intercambio de parejas que le daba amplitud a todo lo que el intercambio de parejas representa además de eliminar un concepto que se consideraba sexista. Durante esta época se hicieron populares las comunas, lugares donde las personas convivían sin límites manteniendo relaciones sexuales libremente con los compañeros que hacían vida en estas.
Luego a finales de los años 90 una nueva y definitiva ola de Swingers se ha establecido como parte del estilo de vida, impulsado por la era tecnológica y de la comunicación, se ha hecho más fácil concretar este tipo de encuentros y comunicarse con personas de preferencias e intereses sexuales similares, además de mantener la discreción necesaria, por lo que ha aumentado la frecuencia de estos encuentros. Otro factor importante es la evolución en cuanto a la aceptación social de este tipo de actividades, aunque aún existe cierto tabú en torno a estas, actualmente se defiende la libertad de expresión de la sexualidad y el derecho que tiene cada individuo de sentirse a gusto ejerciéndola.
Finalmente la era tecnológica, trajo consigo internet y con ello redes sociales para parejas liberales, así como el acceso infinito al contenido donde la pornografía satisface todo tipo de fantasías y aquellas propias del swinger no son la excepción, videos swingers y/o videos de intercambio de parejas se consiguen tanto amateur como profesionalmente satisfaciendo los gustos de esta comunidad desde otro punto de vista.
¿Exactamente cuáles son las prácticas swinger?
El mundo del intercambio de parejas y los encuentros incluye una amplia gama de actividades sexuales ejercidas con libertad y confianza entre las parejas, donde ambos son partícipes y disfrutan del contacto sexual con otras parejas además de no tener inconveniente en que su pareja esté con otros compañeros sexuales, entre estas podemos listar:
- Ser observado mientras mantienes relaciones sexuales con tu pareja.
- Observar otras parejas teniendo sexo.
- Compartir sexualmente con otra pareja (intercambiar parejas)
- Tocar, acariciar, lamer y besar a los participantes.
- Practicar sexo oral con dos o más personas.
- Penetración sexual con dos o más personas.
Para estas actividades son importantes ciertas condiciones:
- El Lugar: en la actualidad existe variedad de clubes Swinger donde quienes forman parte de este movimiento se reúnen por medio de una membresía; estos organizan actividades con diferentes niveles de intimidad, pueden organizar reuniones donde las parejas se dan a conocer en un ambiente ameno que propicie un encuentro de intercambio de pareja posterior; igualmente fiestas donde los participantes van dispuestos a experimentar encuentros sexuales, en un ambiente privado y ameno, ideal para estas prácticas y actividades especiales para cambiar un poco la dinámica y propiciar la interacción entre las parejas e individuos solteros participantes, estas pueden ser shows, concursos, juegos, incluso la grabación videos durante estos encuentros. También se dan encuentros sexuales en hoteles o viviendas particulares luego de que las parejas se han conocido y deciden realizar el intercambio de parejas de una forma más reservada.
- La discreción: aunque el movimiento es muy popular, aún puede considerarse una movida underground o a escondidas, muy probablemente familiares o amigos participen del mundo swinger sin que nunca llegues a enterarte, incluso puede suceder que encuentres algún conocido dentro de una fiesta swinger, lo que no debe sorprenderte, sin embargo esta información no debe trascender; la discreción es parte vital de lo que mantiene a esta comunidad al ser la clave que permite a las personas sentirse en confianza total como para liberarse y poder disfrutar genuinamente la experiencia.
- La mentalidad: con esto nos referimos a la forma en que los integrantes de la pareja perciben la sexualidad y cómo logran separarla de los conceptos que socialmente conocemos como amor, fidelidad y compromiso. Las parejas de este movimiento son personas de mente abierta con la suficiente madurez para no verse afectadas por los celos, para confiar plenamente en su pareja y para reconocer la libertad que tiene cada quien de ejercer su sexualidad a plenitud. Necesariamente son personas sin complejos y con ansias de experimentar y vivir el placer haciéndolo parte importante de su estilo de vida. No tendrán sentimientos encontrados al ver a su pareja con otros compañeros sexuales, por el contrario esta situación podrá parecerle muy excitante.
- El consenso: Ambos integrantes de la pareja deben acceder a participar por su propia motivación y deseo, ambos deben tener esta atracción por el mundo del swinging; por ningún motivo uno de los integrantes de la pareja debe asistir por coacción del otro, ya que contrario a disfrutar puede vivir una experiencia desagradable. Para lograr esto lo más importante es la comunicación entre ambos integrantes de la pareja.
Reglas preestablecidas para los encuentros Swinger
Para participar en un encuentro swinging se ha hecho necesario cumplir con ciertas normativas; sólo una de ellas es universal y es la premisa: “no es no”, lo que significa que los participantes puede negarse a cualquier interacción sexual sin tener que explicar porqué, esto es para proteger la característica de “consenso” necesaria para un encuentro swinger placentero y excitante.
Dependiendo de la región donde te encuentres y del funcionamiento de cada club se implementaran diferentes normativas que debes acatar, por ejemplo, sobre el protocolo permitido para acceder a tocar a otra persona, las consideraciones de aceptar o no individuos solteros dentro del club o algunos límites que apliquen según sea el caso.
La más importante de todas las reglas es además una práctica del sentido común y es el estricto control de la higiene y la salud de los miembros de la comunidad swinger; será obligatorio el uso de preservativos, de los que debe usarse uno para cada persona con quien tenga contacto físico. Además algunos clubes exigen exámenes de laboratorio para certificar las óptimas condiciones de salud de los miembros y evitar enfermedades y complicaciones mayores.
La comunidad swinger en general es abierta de mente en cuanto a características físicas de los participantes sin embargo en algunos clubes se permite a las parejas preestablecer características físicas de los individuos con quien desean compartir, esto es para definir un poco las fantasías que tiene cada pareja y que facilitan el que puedan cumplirlas.
Existen tres etapas o niveles en el swinging, que pueden ir directamente relacionadas con el tiempo que la pareja lleva en el ámbito o simplemente por sus preferencias:
- Suave: es un nivel sutil de intercambio, en este las parejas pueden compartir besos, caricias, sexo oral, sin embargo la penetración no está permitida por lo que la pareja termina teniendo relaciones sexuales junta, bajo la observación de las otras personas, quienes además pueden participar con algunas caricias.
- Abierto o completo: es el intercambio de pareja donde todo está permitido; pueden participar dos o más parejas y todos pueden mantener relaciones sexuales sin límites; alternándose o incluso al mismo tiempo.
- Cerrado: en esta modalidad las parejas se intercambian pero se van a habitaciones separadas donde disfrutar de mayor privacidad; no se encuentran bajo la mirada de la pareja por lo que la confianza en este tipo de encuentro es vital.
Popularidad del movimiento
Como venimos diciendo este movimiento goza de una gran cantidad de adeptos, y por este motivo una serie de iniciativas giran alrededor de esta práctica sexual, con y sin fines comerciales.
Los clubes swinger, además de todas las actividades que ofrecen normalmente tienen una serie de artículos para mejorar aún más las ya de por sí excitantes experiencias; juguetes sexuales, lubricantes, lociones son parte de la oferta. También pueden ofrecer mercancía temática como brazaletes, collares o tobilleras con simbología swinger, especiales para quienes se identifican plenamente con la movida y no tienen inconveniente en llevar una seña que le indique a algún otro entendido en la materia que son swingers activos.
Otra de las iniciativas que ha tomado auge es el turismo swinger; los cruceros temáticos dirigidos para propiciar encuentros sexuales abiertos y conocer parejas con gustos similares; igualmente los viajes a playas nudistas especiales para el disfrute sexual.
Así mismo, los hoteles exclusivos para swinging, van un paso más allá, convirtiéndose en territorio exclusivo para parejas de mente abierta y en busca del disfrute pleno sexual; en estos cualquier espacio es ideal para iniciar un encuentro sexual con integrantes de otras parejas haciendo más sencilla la experiencia de cumplir todo tipo de fantasías sexuales, el intercambio de parejas, los tríos, las orgías, son el día a día de estos interesantes lugares que aunque actualmente son contados en el mundo van aumentando poco a poco en cantidad.
Conclusión
En definitiva la sexualidad es un amplio e importante aspecto del ser humano por lo que cada individuo debe tener la plena posibilidad de disfrutarla al máximo, siempre y cuando no cause daños a terceros ni a sí mismo.
Si eres entusiasta del disfrute sexual, de probar nuevas prácticas eróticas y de experimentar con múltiples parejas, lo mejor que te puede pasar es encontrar un compañero de vida que comparta estos gustos y que no tenga inconveniente en compartirte y ser compartido, las parejas con vínculos afectivos fuertes que no consideran la exclusividad obligatoria, ni la sexualidad plena una infidelidad son las parejas ideales para el mundo swinging y son aquellas que no arriesgan nada en la estabilidad de su pareja al participar en este tipo de encuentros. ¿Te animarías a disfrutar experiencias swinger?
