Voyeurismo

Voyeurismo: Cuando el placer entra por los ojos

Voyeur es el nombre que recibe la persona que encuentra el placer sexual a través de la mirada, del sentido de la vista, al observar imágenes y situaciones sugestivas como pueden ser la silueta de un cuerpo atractivo, la desnudez, vídeos voyeur con parejas manteniendo relaciones o cualquiera de las variantes del porno voyeur.

Origen

La palabra Voyeur viene del vocablo francés voir (ver) y el sufijo eur (el qué) y simplemente significa «mirón» (el que ve). Ciertamente todos tenemos algo de mirón, nos encanta ver, el sentido de la vista juega un papel central en la forma como nos excitamos, en cómo disfrutamos el erotismo y el placer sexual, sin embargo el voyeurismo va un poco más allá. Aunque tiene una amplia gama de matices, es una conducta en la que mirar puede ser lo único que se requiere para alcanzar un orgasmo y depende de cada persona la intensidad en la que se disfruta, así como los estímulos que le causan mayor o menor placer.

Voyeur

Algunos voyeur aseguran que la práctica de mirar va más allá del plano sexual, estos sienten que el placer trasciende el sexo y es más un nivel apreciativo donde un buen cuerpo o una excitante situación puede disfrutarse tal y como se disfruta el arte. En este caso el individuo no necesita recurrir a la masturbación para obtener placer. Sin embargo cada individuo vive su sexualidad de modos diferentes siendo lo más común que el observador se masturbe luego de presenciar el acto que le genera placer.

Una emoción clave que estimula la excitación del voyeur es el temor a ser descubierto, lo es también la sensación de ver a alguien que desconoce que se le está viendo; es la adrenalina que se libera este tipo de situaciones la responsable del placer que experimenta un voyeur, que va ligada a lo “prohibido” de sentir que se está haciendo algo que se considera está mal.

Sin embargo, un voyeur puede experimentar placer aun quitando este elemento de “nerviosismo”, en situaciones en las que por ejemplo, logra de forma consensuada observar escenas eróticas como tal vez una chica masturbándose o una pareja manteniendo relaciones sexuales.

Formas de obtener placer

  1. Una de las formas más simples de voyeurismo es observar los cuerpos sensuales que transitan en la calle, seguir con la mirada una falda corta o unos pantalones muy ajustados pueden generar gran excitación; actualmente todos tenemos una cámara a la mano en nuestros teléfonos, y aunque no lo creas son muy comunes los videos voyeur; con más frecuencia de la que crees alguien en la calle está grabando a escondidas a chicas que considera atractivas o que visten prendas reveladoras, para obtener placer sexual, tanto al momento de grabar como al reproducir el vídeo en su casa. Algunos voyeur son coleccionistas de este tipo de videos.
  2. Mirar o seguir en la calle a parejas que van dándose demostraciones de amor en público, especialmente cuando en estas se puede delatar el deseo que sienten entre ellos o cuando se cree que vienen de un hotel o que van a mantener relaciones sexuales. 
  3. Observar a través de rendijas, cerraduras o ventanillas cuerpos desnudos de mujeres que pueden estar cambiándose o bañándose; es probable que un voyeur salga a la calle, con binoculares en mano, a la búsqueda de alguna incauta que por descuido (o adrede) deje ver su cuerpo desnudo. Familiares y vecinos son frecuentemente objeto de esta furtiva fuente de excitación. 
  4. Las cámaras ocultas generan un inmenso placer sexual, la fantasía de  espiar chicas mientras están en un cambiador o en un baño público por medio de una cámara escondida sin que apenas lo sospechen causa gran excitación, y por esta razón los videos que recrean esta situación se encuentra con facilidad en las páginas porno en la categoría de porno voyeur, siendo clave para la excitación el pensamiento de lo “prohibido”, al invadir la privacidad de una persona que se desnuda libremente y que desconoce que se le está viendo.  
  5. Las cámaras escondidas también pueden usarse para captar parejas manteniendo relaciones sexuales, podemos encontrar este tipo de videos voyeur con escenas donde el novio graba a la chica sin que esta se dé cuenta  o donde se puede ver a una pareja desde una cámara oculta en una habitación de hotel, este material alimenta las fantasías del Voyeurismo, nuevamente impulsado por el elemento de “ilícito” de invasión de la privacidad.

No todo el Voyeurismo está prohibido

Aun quitando la sensación de estar jugando al «escondite» que tanto excita al Voyeur quedan otras formas en las que este puede encontrar placer, un ejemplo de esto es cuando se disfruta de un espectáculo de striptease, en público o en privado, donde sin necesidad de tocar se alcanza un nivel de placer sexual que en algunos casos llega hasta el orgasmo. Hay países donde existen los denominados peep shows donde se presentan imágenes sexuales explicitas a través de una ventana o en un cuarto cerrado siendo una alternativa a esta fantasía.

Otra de las forma en que se obtiene placer visual es al observar rostros que experimentan un orgasmo, mirar los gestos de placer intenso puede ser  suficiente fuente de excitación para un voyeur, aun cuando no esté viendo cuerpos desnudos o ninguna imagen sexual explícita.

rostros que experimentan un orgasmo

Los voyeur pueden obtener placer al acudir a una playa nudista donde tienen la posibilidad de observar cuerpos desnudos sin ninguna restricción, aunque no todos encuentran esta situación excitante, algunas fantasías se pueden nutrir al mirar a una chica específicamente o al observar cualquier tipo de contacto físico entre dos personas desnudas en un lugar público.

Observar parejas manteniendo relaciones sexuales es una de las mayores fuentes de placer sexual para un voyeur, aun cuando este sea de forma consensuada, por lo que pueden encontrar parejas dispuestas a acceder a ser miradas permitiendo incluso que el observante se masturbe mientras los mira.

Puede suceder que una pareja busque un lugar público donde mantener relaciones sexuales, estos buscaran un lugar discreto donde efectuar el encuentro, esta es una situación que un voyeur disfrutaría muchísimo poder observar, por esta razón en el porno voyeur se encuentran variedad de videos que recrean esta situación.

Una conducta que se puede denominar como una variación del vouyerismo es el Candaulismo, donde la persona experimenta excitación al ver a su pareja siendo tocada por otras personas o teniendo sexo con otra pareja, otra variante es al obtener placer de saber que otras personas ven desnuda a su pareja; esta fantasía también es denominada Cuckold en el mundo porno anglosajón.

Sexólogos y Psicólogos estudiosos del tema difieren en cuanto a la pornografía y si observar material erótico pornográfico es o no una forma de voyeurismo; al ver videos porno experimentamos placer, sin embargo la variedad con que se plantean las fantasías en el porno incluyen una variedad mucho más amplia de situaciones sexuales por lo que se hace complejo incluir a todo el que disfruta de material pornográfico dentro de la categoría voyeur.

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Disfruta el Voyeurismo de forma sana

Es importante explorar y disfrutar del sexo y de las experiencias que nos generan placer sexual; siempre y cuando no le hagamos daño a nadie, ni corra riesgo nuestra integridad física.

Al excitarse a través de la vista para el voyeur no es complicado disfrutar del sexo, y de alguna manera logran experimentar situaciones que alimentan su fantasía erótica predilecta, esto tiene una razón y es otra conducta sexual que puede ser  clave: el exhibicionismo. Un exhibicionista es el complemento perfecto para un voyeur: al encontrar placer sexual en ser visto no encontrará inconveniente en generar placer a quien desee verle, es así como tanto el voyeur como el exhibicionista pueden llegar a acuerdos donde ambos cumplan sus fantasías.

chica exhibicionista

De esta forma una chica exhibicionista dejará abierta la ventana al vestirse, disfrutará sabiendo que alguien la está viendo o incluso se está masturbando con ella generando una situación oportuna para un voyeur; del mismo modo una pareja se dejaría grabar o permitiría que alguien esté presente mientras tienen sexo. Frecuentemente sucede que de forma fortuita el voyeur encuentre a un exhibicionista para observar desde la distancia o de forma escondida. Algunas chicas exhibicionistas  no tendrán pudor en salir  a la calle vestida de forma reveladora, aún sabiendo que pueden ser grabadas y pasar a un listado de vídeos voyeur en internet.

La tecnología facilita de muchas formas el disfrute de la sexualidad, una forma en la que esta contribuye a satisfacer los deseos de exhibicionistas y voyeurs es por medio de la emisión de videos en línea usando cámaras web. A través de chats, de páginas especializadas y páginas pornográficas se pueden ver personas que permiten que las vean en situaciones cotidianas o sexuales. Esta es una alternativa interesante para el voyeur ya que ofrece la fantasía de observar a través de una “ventana” a una chica desvistiéndose, bailando, masturbándose o a parejas teniendo relaciones sexuales.

El voyeurismo no les pertenece solo a los hombres

Es importante saber que el voyeurismo no está limitado exclusivamente a los hombres, también existen mujeres voyeur, aunque en menor medida. Estas experimentan placer de la misma forma, observando a escondidas a chicos, viendo a hombres desnudos, masturbándose o manteniendo relaciones sexuales, una mujer voyeur también puede obtener placer sexual observando a parejas, por esta razón podemos ampliar el pensamiento que limita las fantasías voyeuristas solo a un hombre observando a una mujer.

¿Es el voyeurismo algo peligroso?

En la psicología se denomina el Voyeurismo como una conducta o parafilia; es común que se presente en hombres, regularmente en aquellos que de niños tuvieron una educación prohibitiva donde fueron limitados de información sexual, situación que pudo llegar a marcar su sexualidad. La causa entonces se encuentra en la infancia pero se desarrolla en la adolescencia, cuando los chicos comienzan a espiar a familiares o amigas en los vestidores de colegio y puede mantenerse hasta la adultez, cuando el voyeur continúa desarrollando sus fantasías sexuales con mayor libertad. Suele decirse que los voyeur son hombres tímidos que tienen dificultades para comunicarse con el sexo opuesto, esto no es del todo cierto, muchos hombres casados, con pareja estable, continúan disfrutando de experiencias donde se excitan con solo mirar.

conductas sexuales del voyeurismo

Como todas las conductas sexuales el voyeurismo puede convertirse en un trastorno, en una situación enfermiza en la que la persona no se siente en control de su cuerpo ni de sus acciones, pudiendo transformarse en un individuo peligroso, intrusivo, capaz incluso de ser un acosador o violador. Una forma de determinar esto es cuando el individuo no logra obtener placer sexual de otras maneras que no sea a través de la vista, cuando se ven en la necesidad constante de recurrir a estímulos voyeristas; cuando el individuo no logra siquiera el mínimo interés en el contacto físico, si aun teniendo pareja prefiere observar videos voyeur antes que estar con ella y cuando actúa tal como un adicto devorando contenido sexual voyeur. En estos casos es necesaria la terapia psicológica que permita trabajar en esta conducta, buscando la recuperación y la estimulación de  una sexualidad sana.

Más allá esto debemos saber que llegar a estos extremos es totalmente evitable, una buena comunicación de pareja es la llave que abre la puerta de la confianza en todos los aspectos, una pareja sana no encontrará inconvenientes en ayudar a su pareja a expresarse sexualmente y experimentar las fantasías que necesite para disfrutar plenamente del placer sexual. Las parejas sanas comparten experiencias sexuales donde se pueden cumplir la fantasías de ambos sin recurrir al engaño ni a obligar a otro.

Actualmente contamos con una sociedad más abierta sexualmente donde cada vez tenemos más opciones para disfrutar plenamente de la sexualidad sin tapujos y alejándonos del tabú del que dirán; las comunidades swinger especialmente, organizan eventos donde se propician situaciones sexuales diversas ideales para disfrutar del sexo en un ambiente seguro y en confianza de pareja.

Cuéntanos ¿te consideras voyeur? ¿Qué experiencias te genera mayor placer observar?

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